El mes pasado comenzábamos una serie sobre movilidad sostenible. En el primer artículo introducíamos el concepto de transporte sostenible y analizábamos el sector transporte. Entonces veíamos la importancia que tiene la movilidad en nuestra vida y nuestra sociedad, especialmente en el ámbito urbano. Es en la ciudad donde la demanda de transporte se hace más intensa y donde los impactos de este se multiplican y afectan a más personas. En este segundo artículo vamos a ver una serie de problemas que acarrea que nuestra movilidad no sea tan sostenible como debiera, al estar sustentada principalmente en el uso del vehículo privado.
La sostenibilidad se basa en tres pilares fundamentales: económico, medioambiental y social. Sobre estos tres ámbitos se producen también las externalidades del transporte.
Problemas económicos
- Costes económicos: El uso del vehículo privado es más costoso que otros medios de transporte. Especialmente durante las últimas semanas, cuando el aumento del precio del petróleo ha alcanzado máximos históricos. Pero no es solo combustible, muchas veces no consideramos todos los gastos que supone coger el coche (aparcamiento, peajes, mantenimiento, recambio de neumáticos y aceite, seguro, impuestos, amortización, multas, etc.). Todo esto va incluido en el billete de transporte público.
- Congestión: Se pierden millones de € en los atascos todos los días. Si el tiempo que pasamos atascados lo dedicáramos a algunas tareas más productivas y estas las transformáramos en dinero sería un pellizco del PIB.
- Pérdida de competitividad: El hecho de que las carreteras estén colapsadas supone que personas y mercancías se muevan más lentamente. Si hiciéramos un símil con el sistema circulatorio, la ciudad tendría un problema cardiaco.
- Dependencia energética: Este tema ha cobrado especial relevancia durante las últimas semanas por los motivos explicados en el primer artículo de la serie. España tiene una dependencia energética del 78% con otros países, principalmente en áreas conflictivas del planeta.
- Consumo de espacio público: El transporte privado es el más ineficiente ocupando espacio. Por donde pasan 2.000 coches, pueden pasar 14.000 bicicletas o 22.000 pasajeros de un tren. Mucho espacio que le dedicamos en nuestras calles al coche podría emplearse para otros usos optimizando el reparto de la sección, sobre todo por lo cotizado que esta el metro cuadrado en nuestras ciudades.
Problemas medioambientales
- Contaminación: Según la Agencia Europea del Medio Ambiente, cada día 10 millones de españoles están expuestos a concentraciones de contaminantes más elevadas que las que fija la Unión Europea, y estudios demuestran que se producen 16.000 muertes al año como consecuencia de la contaminación atmosférica. A pesar de que este tema se haya pasado de moda en los periódicos, seguimos sufriendo los mismos efectos que hace dos meses.
- Cambio climático: Nuestro coche (y el de nuestros vecinos) es responsable del ¡¡11% de las emisiones de CO2 en España!!
- Ruido: El tráfico produce el 80% del ruido ambiental en las zonas urbanas, que se ha demostrado estar relacionado con enfermedades cardiovasculares, insomnio, alteraciones del sistema nervioso, pérdida de oído, fatiga , problemas de concentración, y dificultades de comunicación y relación social.
Problemas sociales
- Accidentabilidad: A pesar de que en los últimos años se ha reducido la tasa de mortalidad en las carreteras, el número de muertos por accidentes de tráfico sigue siendo inaceptable en nuestra sociedad.
- Inequidad: Se da por hecho que todo el mundo puede acceder en coche a prácticamente cualquier punto del territorio, pero ¿qué pasa con las personas que no tienen carnet de conducir? Que se siguen aumentando las desigualdades sociales con colectivos como mujeres, inmigrantes, ancianos o niños.
- Falta de accesibilidad: Una política de movilidad basada en el uso del vehículo privado hace más difícil el acceso de otros medios de trasporte debido a la congestión, la invasión del espacio (aceras, pasos de peatones, carriles bus, etc.) o la inseguridad que provocan los coches.
Estos son algunas de las externalidades que supone un sistema de movilidad poco sostenible en las ciudades. En el último articulo de la serie veremos algunas soluciones para conseguir que nuestras ciudades disfruten de la ecomovilidad.
¿Qué ciudad es la de la segunda imagen? Madrid seguro que no, porque se ve un barco en el río.
Gracias Emilio. El próximo articulo será un poco más optimista con las soluciones
Buen trabajo (la primera imagen del atasco madrid no llega a cargar)