Editado 20/08: Renfe Cercanías ha anunciado que el servicio se restablecerá el jueves 21, un día antes de lo previsto, al haberse finalizado las obras en la vía.
El verano de 2014 está siendo prolijo en cuanto a obras en el transporte público. A las «operaciones asfalto», la renovación de marquesinas o los cierres en tramos del metro se suma la semana que viene el cierre en las líneas C-3 y C-4 de Cercanías Renfe, que sufrirán modificaciones en su recorrido habitual. Entre el lunes 18 y el jueves 21 miércoles 20 se realizarán trabajos de mejora en la infraestructura que obligarán a interrumpir el servicio en el Túnel de Sol, el conocido como ‘Tubo de la Risa 2’. A partir del viernes 22 jueves 21 el servicio recupera sus recorridos habituales.
Cambios en la línea C-3 Aranjuez – El Escorial
- Los trenes con origen/final en Chamartín iniciarán y finalizarán recorrido en Atocha Cercanías.
- Los trenes con origen/final en El Escorial circularán por el Túnel de Recoletos, con parada en dicha estación.
Cambios en la línea C-4 Parla – Alcobendas-S.S. Reyes/Colmenar
Durante estos días, la línea C-4 quedará partida en dos tramos:
- El tramo sur, entre Parla y Nuevos Ministerios.
- El tramo norte, con cabecera en Chamartín.
Para ambas líneas, se mantienen las frecuencias de paso propias de verano.
Alternativas al tramo afectado
Las obras previstas se realizan sobre un túnel con otro paralelo, por lo que la alternativa más sencilla consiste en utilizar los trenes del Túnel de Recoletos (C-1 C-2 C-7 C-8 y C-10) para alcanzar Atocha o Chamartín. Es importante prestar atención a los paneles electrónicos, ya que las vías de paso serán diferentes a las habituales.
Otras opciones útiles son las líneas 1 y 10 de Metro de Madrid, o las líneas de EMT que recorren el eje Norte-Sur (5, 14, 27, 147 o 150, entre otras) aunque no hay que olvidar que el servicio en Metro y EMT es muy reducido debido a los horarios de agosto.
Es inaceptable ademas de unos empleados incompetentes para informar de tanta puta obra que nos cuesta diner a los usuarios.
No se llama Tubo de la risa sino TÚNEL de la risa.
Pues no, la palabra «tubo» está puesta a propósito y es totalmente correcta.
El apodo proviene de la gestación del proyecto de Enlaces Ferroviarios de Madrid, promovido por Indalecio Prieto en los años 30. La prensa conservadora de la época tildó el túnel Atocha-Chamartín de inútil e irrealizable, apodándolo «el tubo de la risa» a semejanza de una popular atracción de feria de la época.
“….Y que nos han minado Madrid con un tubo que se llama el tubo de la risa, pero que quizá sea una vez más el tubo de la afrenta, porque va a servir para que pasen por debajo de nuestra Península, hacia trincheras que no nos importan, las tropas coloniales de cualquier país vecino…..” (José Antonio Primo de Rivera, 1933)
Apodo que ha venido manteniendo hasta hoy incluso para su moderno eje paralelo, el túnel de Sol. El desconocimiento de su origen ha provocado que se le haya denominado erróneamente «túnel de la risa». Por cierto, a nivel técnico «túnel» y «tubo» son sinónimos y se pueden utilizar indistintamente.
Un saludo,