Reabre la línea 5: Consideraciones sobre el cierre

Hoy es el primer día de servicio después del corte veraniego de esta línea por las obras de soterramiento que el Ayuntamiento de Madrid está llevando a cabo entre las estaciones de Campamento y Empalme. Pasados 23 días la línea 5 ha reabierto sus puertas en el tramo afectado, desapareciendo los servicios especiales programados y volviendo a operarse la circulación habitual de los trenes.

En este sentido, desde ecomovilidad.net queremos hacer una serie de consideraciones sobre como se ha gestionado el cierre de la línea, sus consecuencias para la movilidad de los distritos de Latina y Carabanchel y sobre la información que se ha aportado al viajero

Plan Alternativo de Transporte

Creemos que el SE de la EMT se ha quedado corto. Entendemos que haya que optimizar los recursos y que siendo viable operar la línea con una lanzadera entre Campamento y Casa de Campo se emplee, pero no es lo mismo servir varias estaciones (como fue el caso de la Línea 1 el verano pasado) que servir una sola. En este caso, además de tener que esperar al SE en Aluche toca esperar a la lanzadera en Campamento para una única parada, lo que amplifica los efectos del corte y las demoras para aquellos vecinos que viven en estaciones anteriores a Aluche.

En este sentido, la mejor opción hubiese sido un SE hasta Casa de Campo o Colonia Jardín. Con ello permitiríamos una conexión suficiente y cómoda para los vecinos de Campamento y evitaríamos esta duplicidad de esperas al resto de vecinos de Latina y Carabanchel. Además, Metro ahorraría en personal dado que para operar la lanzadera hacen falta dos conductores al circular sin sistemas de protección y en mantener 4 trenes cautivos y aislados de la red, con el riesgo que eso supone.

Incluso, si el problema fuese el coste, es perfectamente viable mantener la línea operativa hasta Empalme (hay un precioso desvío que permite cambiar de vía) y emplear el SE para cubrir el tramo entre Casa de Campo y Empalme, con lo que los costes hubiesen sido similares al SE operado entre Aluche y Campamento.

Necesidad del corte

Podemos entender que hubiese sido necesario un corte de un fin de semana (o incluso de una semana entera) para derribar la antigua subestación de Campamento, pero no podemos entender como en este caso nos encontramos con un corte de casi tres semanas de duración mientras que obras equiparables, como los «soterramientos» de Entrevías y Villaverde no supusieron ni un solo día de corte en el servicio.

Durante toda esta obra la vía y la catenaria han estado en su sitio y con tensión esta última. Decimos que estaba con tensión puesto que si no hubiese tensión en la catenaria no habría podido circular la lanzadera entre Casa de Campo y Campamento puesto que todo el tramo depende de la subestación ubicada en esta última estación, con lo que era perfectamente viable no suspender el servicio. Es más, todas las operaciones que se han hecho en Campamento (ejecución de pantallas, colocación de vigas, ejecución de la losa, consolidación de trincheras, desmontaje del cerramiento pre-existente, cambio de catenaria…) y algunas más complejas, como la ejecución de una estación cuya cúpula se alza a más de 25 metros de altura sobre la rasante de la calle y directamente sobre las vías, se han se han llevado a cabo de igual manera en Entrevías sin cortar el servicio de trenes y realizándolas en horario nocturno.

Entendemos que es más incomodo y más caro (sobre todo por los pluses de nocturnidad) trabajar de noche que cortar la línea y trabajar de día, pero en casos como este ha de primer el servicio publico sobre el coste de la obra.

Información al viajero

En este corte, como en el resto de cortes que hemos sufrido este mes, hemos detectado problemas de información al viajero.

Lo primero y de entrada es que la información en la web de metro ha sido mala, enlazando como única explicación un PDF a baja resolución que reproduce los avisos colgados en las estaciones. Esto hace que sea difícil leer el itinerario del SE alternativo. Es más, incluso la EMT proporciona una mejor información, con los esquemas detallados de las rutas del autobús sustitutorio como podemos observar si buscamos el SE 740 que es el que cubre el servicio de la línea 6 entre Cuatro Caminos y Legazpi

Además, en Campamento ha habido problemas con los teleindicadores, los cuales no mostraban el tiempo de espera para la llegada del tren, siendo esto un problema al estar hablando de intervalos que rozan los 10 minutos. A esto se suma una mala indicación del punto de parada en Casa de Campo, que hace que los viajeros tengan que desplazarse cuando llega el tren puesto que este es más corto de lo habitual y para unos metros más allá en el anden. En Campamento por el contrario se ha delimitado la zona de parada con una valla lo cual es mucho más visual que la solución empleada en Casa de Campo.