El listado de líneas de la EMT está, por lo general, organizado de manera bastante intuitiva: las líneas regulares tienen por nombre un número, las universitarias, una letra, y las de ciertas subredes especiales, una letra y algún número. Lo que no encaje en ninguna de estas categorías es relegado al cajón de los Servicios Especiales: líneas a cementerios, sustituciones por obras del metro, líneas a barrios muy nuevos, y casi cualquier cosa que no sea claramente un servicio corriente y moliente.
Pero hay una excepción: la 180, que va de la plaza de Legazpi a la Caja Mágica, un estadio en el sur de la ciudad que alberga el Open de tenis de Madrid y en el que a veces se celebran otros eventos. La actividad tan puntual en el recinto hace que la línea 180 solo opere cuando se celebra algún evento… y resulta que la línea lleva no ha tenido ocasión de circular desde noviembre de 2019, hace casi 17 meses, con la celebración de la copa Davis.
No es solo culpa de la pandemia: en los últimos cinco años solo ha sido puesta en servicio un total de ocho veces, que en total suman 54 días de servicio. Sale a una media de dos semanas al año, sin contar 2020. Para más inri, los días que circula lo hace con horario limitado: desde una hora antes del inicio del evento hasta una hora después del final.
La señalización
Además de circular una o dos veces al año (o más bien, a causa de ello), la 180 destaca porque hay que esforzarse por encontrarla: en su cabecera de Legazpi, donde hay un poste y una marquesina, solo aparece su indicador, ni rastro del esquema. En la parada de la Caja Mágica, ni eso: no hay ningún indicio de que ahí pare la 180, solo se habla de la T32.
Una anomalía también entre sus iguales
La 180 no es única solo entre las denominadas como regulares, sino que también difiere entre las líneas que van a estadios: su prima lejana, el SE721 [Canillejas – Estadio Metropolitano], tiene las mismas características que la 180 (recorrido corto sin paradas, horario acotado al evento y servicio muy esporádico) y sin embargo recibe un nombre mucho más adecuado.
Y es que resulta que la 180 también se denominaba como SE hasta mayo de 2012, cuando se cambió la denominación por la actual alegando que era para que su identificación y utilización sean más sencillas para los usuarios, un argumento muy poco convincente. Personalmente, veo más probable que el motivo fuera otro: dar la impresión de un servicio más frecuente a un estadio en el que se hubieran realizado las pruebas de tenis de haber albergado Madrid los Juegos Olímpicos a los que se presentó. Si para eso había que desordenar un poco la red, pues se hacía.