El aumento del IVA perjudica más al usuario habitual que al ocasional

A partir de mañana, 1 de septiembre, el tipo impositivo del IVA aplicable al transporte público pasará del 8% al 10%, de manera que, según aprobó la ATM el pasado 30 de julio, la T-10 de una zona, la tarjeta más usada, costará 9’45 euros, es decir, 20 céntimos más que hasta ahora. También aumentarán su precio los demás títulos multiviaje. Así, la T-50/30 pasará de 37 euros a 37’70 euros, mientras que la T-Mes ya no costará 50 euros, sino 50’95 euros.

En consecuencia, la T-Mes prácticamente alcanzará los 51 euros que valía el año pasado, cuando se aprobó el mayor aumento de tarifas de la última década en la T-10 y la T-50/30 a cambio de bajar solo un 2% el precio del abono mensual ilimitado. Y es que, aunque no sea únicamente responsabilidad de la ATM, quienes a partir de mañana adquieran la T-Mes pagarán un 0’1% menos que hace un año, mientras que quienes compren la T-10 o la T-50/30 deberán abonar un 14’5% y un 12’5% más, respectivamente, que hace 12 meses.

Otros títulos pensados para usuarios habituales, como la T-Trimestre y la T-Jove, también verán incrementados sus precios por la subida del IVA. Concretamente, la T-Trimestre pasará de valer 135 euros a costar 137’50 euros, mientras que la T-Jove ya no tendrá un precio de 100 euros, sino de 101’85 euros.

Pero… ¿afectará el incremento del IVA a todos los usuarios del transporte? La respuesta es negativa, pues, aunque parezca paradójico, el único título de transporte que no verá incrementado su precio será el billete sencillo, precisamente aquel que utilizan los usuarios ocasionales. En definitiva, quienes contribuimos diariamente al sostenimiento del transporte público tendremos que pagar más, mientras que quienes hacen un uso residual y esporádico del mismo continuarán abonando exactamente la misma cantidad. Sin duda, ello no contribuye a fomentar la movilidad sostenible.

El consuelo que nos queda a los usuarios habituales es que los títulos de transporte que sean adquiridos antes del 1 de septiembre mantendrán las tarifas vigentes hasta ahora y podrán ser utilizados hasta el 28 de febrero del año que viene, salvo los títulos trimestrales, que serán válidos hasta el 31 de marzo. No lo pienses más y ahórrate unos euros comprando hoy las tarjetas que vayas a necesitar durante los próximos 6 meses. Ten en cuenta, además, que si, llegado el 28 de febrero de 2013, aún tienes alguna tarjeta de este año que no hayas empezado a utilizar podrás cambiarla por una nueva, abonando solo la diferencia.

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