¿Se imaginan llegar un día a un paso de peatones y no poder cruzar? Esto podría decirse que es lo que pasó ayer en los semáforos del cruce de la calle Pedro Antonio de Alarcon con calle Sócrates dónde en 3 de los 4 semáforos la indicación de paso peatonal se quedó fija en rojo (y verde para los coches) durante horas y hasta media tarde, cuando un técnico de movilidad solucionó el problema.
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La calle Pedro Antonio de Alarcon se caracteriza porque una gran cantidad de peatones cruzan «por cualquier sitio», no queremos justificar estas acciones, pero no es para menos cuando la distancia entre acera y acera es mínima y los tiempos de espera en los semáforos son largos (priorizando así el tráfico de vehículos a la movilidad peatonal).
Por ello este problema (que un semáforo esté mal programado o se haya estropeado) no parece haber causado grandes estragos en este punto, mientras estuvimos ahí comprobamos que la mayoría de los viandantes no hacían siquiera el amago de esperar a que el semáforo se pusiera en verde. Sin embargo si pudimos comprobar en vivo cómo una señora de movilidad reducida se quedaba «atrapada» a un lado de la acera.
Hacía las 19:40 de la tarde un técnico de movilidad reponía el semáforo en su anterior estado
Con esto solo queremos reflexionar cómo en nuestras ciudades a veces dependemos de unas lucecitas que están ahí para mejorar la seguridad y aumentar el flujo de tráfico, pero en ocasiones estos sistemas fallan en su cometido, ya sea por una avería como esta que indicamos hoy (que hemos comprobado como se ha solucionado rápidamente), o por una programación de tiempos demasiado abusiva para un lado de la balanza que, como el caso de Pedro Antonio, puede acostumbrar con el paso del tiempo a los viandantes a cruzar de forma poco segura.
Los suspicaces me dirán que polemizo, lo que es pero una gran verdadera realidad que el ser humano si en algún momento de sus manifestaciones lo ha sido es y será, al entrar en el vehículo a motor se integra como otra pieza más del engranaje, cuando coge velocidad parece que los peatones son obstáculos a esquivar, no me gustan los semáforos en ámbar para los conductores y verde para los peatones, se regulan perjudicando al peatón de corta edad ancianos o con graves problemas de movilidad reducida o visual, indignado con total asombro por que es imposible cruzar siquiera como campeón de cien metros lisos ¡¡¡¡¡¡¡¡¡ es que se os va enfriar la comida, para circular a tan gran velocidad !!!!! quién corre mucho se pierde el paisaje