El autobús sustitutorio de la línea 7: ¿por qué hacer las cosas mal sabiendo hacerlas bien?

El pasado domingo 27 de noviembre, prácticamente por sorpresa, la Comunidad de Madrid anunciaba el cierre de la línea 7 entre Cartagena y Gregorio Marañón, desde hoy 3 de diciembre hasta el día 18. Como es habitual en este tipo de cortes, la EMT ha habilitado un servicio especial de autobuses gratuitos, pero solo entre Cartagena y Avenida de América.

Lo primero que nos llama la atención son las fechas escogidas para este corte. Este tramo se ha cerrado para poder retirar el amianto de los andenes de Avenida de América, pero en otras actuaciones similares (en Conde de Casal o en Duque de Pastrana, por ejemplo) los cortes se hicieron en verano para evitar las molestias al viajero. En esta ocasión, sin embargo, el corte se ha hecho en diciembre, uno de los meses con mayor afluencia de viajeros, en lugar de esperar a verano.

El otro aspecto llamativo, si no ilógico, es el servicio de autobús sustitutorio, que solo cubre la mitad del tramo cerrado. El recorrido, de un minuto de duración y con un tiempo de paso de unos 6 minutos, cubre solo desde Cartagena hasta Avenida de América, una distancia que perfectamente se puede hacer andando, pero no llega hasta Gregorio Marañón. Ignoramos el motivo tras esta decisión, ya que en Gregorio Marañón hay espacio más que de sobra para ubicar la cabecera y así se evitaría tener que mandar a la gente por el transbordo largo de Nuevos Ministerios.

Por último, creemos que no se ha hecho una labor suficiente informando al público de las principales alternativas al corte. Por ejemplo, al llegar a Guzmán el Bueno desde el norte se podría informar del enlace a Avenida de América mediante la línea 6, o al llegar a Pueblo Nuevo por el este se podría recomendar usar la línea 5 para llegar al centro; en lugar de mandar al viajero a un bus ridículo o a dar una vuelta innecesaria por la red.