Es cada vez más habitual en nuestra ciudad. Mientras que en otras ciudades existe un escrupuloso respeto por la normativa que regula la señalización de las vías públicas, en Madrid se permite e incluso se implantan desde el propio Ayuntamiento señalizaciones que incumplen la ordenación.
Aquí tenemos un ejemplo de como una entidad privada ha instalado una señal fijándola irregularmente al pavimento para señalizar su aparcamiento.
Y tú, ¿conoces más casos como este? Indícalo en los comentarios 🙂
Lo curioso de la foto, es que ese cartel no está escondido en un rincón, esta en una calle con mucho transito, ¡justo al lado de la asamblea de Madrid!
Como curiosidad, decir que justo allí fue donde me encontré con los primeros «badenes para limitar la velocidad» (ya hace años), que curiosamente no tenían una rampita de entrada y de salida, si no un bordillo normal y corriente, de una altura normal y corriente. ¡No veas que risas!