Desde hace algunos años, los músicos tienen permitido tocar en el metro a cambio de dinero. Desde Metro de Madrid nos explican que no cuentan con una normativa muy concreta en estos casos: lo que se pide es que lo hagan sólo en pasillos o vestíbulos (nunca en trenes) y que sigan las instrucciones del personal para no complicar la circulación de personas, poner en peligro la seguridad o molestar al viajero. La conclusión de todo ello es que en la actualidad podemos encontrar muchos músicos en los pasillos de nuestro metro (algunos también en los trenes) de todo tipo de calidad.
Nuestros compañeros de ecomovilidad.net Barcelona han hecho un reportaje sobre el interesante programa Músics al Metro que mantiene allí la operadora de transporte TMB. Allí están mucho más reguladas las actuaciones de los músicos en el metropolitano.
Espacio de "Músics al Metro"
En primer lugar, en vez de que sea el propio músico el que decida dónde establecerse, la propia compañía ya ha delimitado hasta 34 espacios en estaciones donde pueden tocar. Estos espacios están decorados con la marca Musics al Metro e incluso espacio para folletos. Además, no se permiten instrumentos de percusión o amplificadores que superen los 20 vatios de potencia.
Los músicos que quieran tocar deberán pasar una prueba de calidad, que TMB realiza periódicamente en colaboración con la Associació de Músics del Carrer i el Metro. En esta prueba deben presentar un repertorio de 15 canciones, de las cuales un jurado de profesores de música elegirá tres, evaluándose su calidad, variedad y que su actuación sea compatible con el uso normal de las actuaciones. Más de 600 músicos han pasado esta prueba ya.
Además, TMB realiza actos de difusión de la música de estos artistas, como actuaciones o exposiciones.
El sistema barcelonés nos gusta porque aporta control y una garantía de calidad musical. Si bien creemos que Metro de Madrid acertó permitiendo a los músicos tocar en sus instalaciones, tal vez debería ser una actividad más controlada para garantizar que los viajeros disfrutan de actuaciones variadas y de calidad. Además, esto permitiría que al igual que Barcelona, en Madrid los músicos del metro dejasen de ser simplemente parte del paisaje de la estación y fuesen uno de sus activos, promocionándolos y difundiéndolos.
¿Y tú, qué opinas? ¿qué modelo te gusta más?
En Barcelona las agresiones musicales no suelen venir de los músicos, que suelen ser bastante aceptables, sino de la propia TMB. Le he pillado una mania a «get happy» la canción que usan para las campañas publicitarias que se te clava en el cerebro mientras esperas al siguiente metro o vas por los pasillos de buena mañana…
http://curiositats.cat/images/fbfiles/files/Ignacio_Battaglio___Get_Happy_TMB_ens_mou.mp3
Y bueno, abría que ver si el vendedor de iguales de Sants Estació no es competencia desleal a los músicos, porque la cantinela de «para_el cupón, para_iguales, para_el cupón, para_iguales para_hoyyyyyyyyyyyyyyyy» es realmente pegadiza.
Antes de cambiar la normativa, sería importante hacer cumplir la actual. Los músicos en los trenes gozan de total impunidad y perjudican gravemente a los que tocan en los pasillos cumpliendo la norma.
Si bien lo del jurado sea algo excesivo, si que estaría bien habilitar espacios señalados en los pasillos donde la música sea un valor añadido al viaje.
A mí no me gusta que toquen en los vagones. Ya son los trenes inevitablemente bastante ruidosos, como para que vengan unos tipos a tocar instrumentos con amplificadores, que no te dejan ni pensar.
Vamos, que dan ganas de pagarles para que se callen. Además, todos tocan (algunos más bien destrozan) la misma puta canción: Historia de un amor. Estoy empezando a odiarla.
En los vestíbulos y pasillos amplios me parece bien. Si no me interesa oírlos, no me detengo y punto.
Aunque alguna vez encontremos sonidos estridentes, creo que es mucho mejor la espontaneidad y la libertad del músico que va a su bola y toca lo que quiere. Mayor variedad y me parece más interesante culturalmente 😉
Yo veo bien tal y como está ahora. La gente no se queja de la calidad de quienes tocan en el metro, así que cambiar la normativa no estaría justificado ahora mismo.
La verdad es que a mi solo me molestan los que tocan dentro de los trenes… tampoco lo vería aceptable en un andén (que nunca lo he visto).
Salu2!!
Hay una cosa del sistema de Barcelona que no entiendo. Si durante la prueba obligan a los músicos a tocar 15 canciones y luego eligen 3, ¿no se están cargando la variedad de la que hablas en tu artículo?
El músico presenta su repertorio de 15, pero durante la prueba sólo tiene que tocar 3, elegidas por el comité examinador 😉