Madrid, una de las ciudades que menos lucha contra la contaminación

Que en Madrid exista contaminación y que esta es un grave problema es un hecho más que constatable. En ecomovilidad.net hemos señalado en repetidas ocasiones que las medidas que nuestro Ayuntamiento ha puesto en marcha para combatir los distintos modos de contaminación son insuficientes. De este modo hasta se ha llegado a solicitar a las instituciones europeas la moratoria en la aplicación de los niveles máximos de contaminación.

Ayer, el European Environmental Bureau (EEB) publicó un informe respecto a las buenas prácticas que realizan las ciudades europeas en materia de reducir la contaminación en el que se comparaba Madrid con otras 17 ciudades europeas como Berlín, Estocolmo, París, Amsterdam, Londres o Roma. En dicha comparativa ostentamos el puesto decimotercero y compartiendo puntuación con Bruselas, Londres y Stuttgart. Esto nos sitúa casi a la cola de las ciudades que tienen en cuenta la contaminación y luchan por atajarla. La puntuación se realiza con una escala de tipo Likert de cinco tramos (- – / – / 0 / + / ++).

Centrándonos en el caso concreto de nuestra ciudad, el estudio, como hemos dicho, nos deja en suspenso, con una puntuación de 58%. Los siguientes factores han sido los que han condicionado dicha nota:

  • Éxito en la reducción de las emisiones (- -): Las mediciones en los últimos años, como hemos podido comprobar, han superado de forma notoria los límites establecidos. Además el informe destaca la reorganización de las estaciones de medición que supuso la pérdida de la fiabilidad en el histórico de los datos.
  • Zona de bajas emisiones y límites a altos emisores/Emisiones de vehículos que no transcurren por carretera (- -): El estudio señala que la ciudad no respondió a dicha pregunta ni mostró documentos que pudiesen mostrar posibles medidas que limitasen la contaminación en dichas zonas. Igualmente no se respondió a la procedencia de emisiones de medios que no transcurren por carretera.
  • Contratación pública de vehículos “limpios” (+): Sin duda alguna en los últimos años hemos asistido a una política municipal que apostaba por vehículos limpios. En el informe se destaca que la flota municipal de coches se encuentra constituida en poco más de 1/3 por coches con bioetanol, híbridos o de GNC. Asimismo se hace hincapié en el hecho de que la flota de la EMT apuesta por combustibles alternativos perdiendo prioridad el diésel.
  • Incentivos económicos (0): Pese a que en Madrid no disponemos de tasas por congestión o peajes urbanos se resalta la creación del SER, que en cierto modo disuade la utilización del coche. Además se pretende priorizar el aparcamiento a aquellos coches que contaminen menos bien sea reservando plazas o ofreciendo incentivos fiscales, aunque primordialmente sea a vehículos eléctricos o híbridos.
  • Gestión del tráfico y la movilidad y reparto modal (+): Además de los límites de velocidad en la M30, destacan la existencia de carriles exclusivos para autobuses, taxis o motos. El reparto modal en 2009 se dividió en un 23% de vehículo privado, 39% de transporte público, 0,6% en bicicleta y 37,4% a pie.
  • Intercambio modal al transporte público (++): Se recalca la extensión del sistema de transporte público madrileño, con medidas que han mejorado su extensión, accesibilidad, rapidez e información para los usuarios. Asimismo se destaca que los precios comparados con otras ciudades europeas son menores (en el momento del estudio el billete sencillo costaba 1€).
  • Intercambio modal a modos peatonales y ciclistas (0): El EEB señala que actualmente la cuota de ciclistas en la ciudad se encuentra en el 0,6%, y se aspira a llegar al 3% en los próximos 5 años. Asimismo para ese límite se espera que la red ciclista se incremente en casi 2,6 veces la actual. Paradójicamente en el informe se señala el sistema MyBici como medida a introducir, que como todos sabemos ha sido aplazado de momento.
  • Transparencia y Políticas de Comunicación (+): El estudio destaca que el Ayuntamiento dispone de una aplicación web que informa en tiempo real de la situación del aire en la ciudad y que existe un comité de calidad del aire en el que participan distintos colectivos.

En síntesis podemos ver que Madrid no ha hecho grandes esfuerzos en lo que se refiere a reducir las emisiones, y no vale con poner excusas, culpar a los demás o pedir moratorias. Es preciso efectuar medidas que si bien pueden resultar impopulares pueden revertir en cambios positivos en el futuro. No es el tiempo por tanto de las palabras, es el tiempo de los hechos y el momento de tomar ejemplo de lo que hacen otras ciudades, de tomar su experiencia, hacer autocrítica y apostar por una ciudad más sostenible si es que queremos situarnos a la vanguardia de Europa.

Por esto es preciso ser más estrictos con el control de la contaminación, establecer medidas como la tarifa de congestión que disuadan de tomar el coche o promover peatonalizaciones, que sin duda alguna además de revitalizar la zona, permiten reducir estas emisiones. Asimismo resulta paradójico que la tasa de uso de bicicleta sea tan sumamente baja y que se pretenda quintuplicar en 5 años. Para ello el Ayuntamiento ha de tomar una postura clara en pro de la bici otorgándole el protagonismo que merece en el contexto urbano y no hacer medidas que sólo quedan bonitas de cara a la galería.

Sobre el autor
Licenciado en Administración y Dirección de Empresas. Estudiante de máster en Marketing y Comunicación en la Universidad Europea

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3 thoughts on “Madrid, una de las ciudades que menos lucha contra la contaminación

  1. Creo que no se discute la calidad del transporte público madrileño (muy alta), sino la «promoción» del transporte público por parte de las autoridades.

    Promocionar el transporte público significa educar a la gente en su correcto uso mediante campañas que aporten algo más que «tenemos el mejor metro del mundo». Se puede tener un buen transporte público y promocionarlo mal, e incluso a la inversa.

  2. Según un artículo publicado en El País, <<Madrid solo consigue la nota más alta en el apartado de promoción del transporte público.>>

    Y me parto de risa con esta megafrase. Salvando las campañas de la EMT (muy buenas), las de Metro no sirven para incitar a su uso sino para regodearse de lo bueno que es, cuando realmente es más fiable viajar en escopeta de feria – que se que no es un medio de transporte pero igualmente es más fiable.

    Creo que los madrileños deberíamos exigir mayor responsabilidad al Ayuntamiento y Comunidad con este tema de la contaminación y, en el caso de la CAM, con las políticas de transporte público. Excluyo al Ayuntamiento porque la revolución que ha hecho en la EMT no tiene precedentes y opino que va por el buen camino… a falta de aceptar el tranvía como medio de transporte moderno sostenible.