Apenas quedan unas semanas para que se produzca el mayor cambio de la red de autobuses urbanos de Granada en los últimos años. Este cambio tiene como eje la entrada en funcionamiento de la «LAC«, acrónimo de «Linea de Alta Capacidad«, pero ¿Qué es la LAC?
Bus Rapid Transit
En Granada hemos bautizado este sistema/línea de autobús como «Línea de Alta Capacidad», que es un nombre bastante directo y entendible, pero el nombre original de este sistema es «BRT», acrónimo de «Bus Rapid Transit».
Línea Verde en Curitiba, Brasil.
El Bus Rapid Transit es un sistema dedicado a desplazar grandes cantidades de personas, al nivel de capacidad de un servicio de tranvía habitual, pero de una forma mucho más económica en cuanto a infraestructuras. Este sistema combina una forma de transporte con infraestructura y tecnología:
- Adquirir autobuses o trolebuses (autobuses eléctricos) de gran longitud.
- Establecer y señalizar vías reservadas para estos vehículos.
- Dotarlos de tecnología, como un Sistema inteligente de Ayuda a la Explotación, que haga que los vehículos cumplan sus frecuencias.
- Tecnología adicional como Prioridad Semafórica, para que los semáforos se pongan en verde a su paso, dando así preferencia al transporte público frente a otros vehículos; o sistemas de guía, para que el vehículo se aproxime con precisión y seguridad a la parada.
- Diseñar y construir nuevas paradas adaptadas al sistema. Se intenta facilitar el acceso al autobús colocando la acera de la parada a la altura de las puertas de los vehículos.
- Sistemas de pago y billetaje más rápidos, así como acceso por todas las puertas.
Las ventajas del BRT frente a un sistema tranviario o de metro son su economía en infraestructuras (es muchísimo más barato de construir), la accesibilidad (ya que tiene paradas a nivel de calle), una mayor cercanía entre paradas en términos generales y una mayor flexibilidad respecto a posibles cambios de ruta.
Las desventajas son que no puede llegar a crecer tanto como un metro o un tranvía en cuanto a capacidad de viajeros, puede verse afectado por eventos en el tráfico, y es un sistema menos eficiente energéticamente durante su explotación, y por tanto más contaminante en el largo plazo.
Este sistema está ampliamente extendido por grandes urbes de países sudaméricanos, son característicos los implantados en ciudades de Brasil, México, o Colombia.
Nuestra «LAC»
En el caso de Granada es con esto con lo que nos quedamos de un sistema BRT:
- Autobuses articulados de 19.5 metros, adquiridos a Mercedes y con una capacidad de 180 pasajeros.
- Todas las vías no son completamente reservadas, aunque si bastante restringidas.
- No se ha hecho público si irán dotados con un Sistema Inteligente de Ayuda a la Explotación, o de qué forma controlarán las frecuencias y otras incidencias de cara a un funcionamiento óptimo del servicio.
- Se desconoce si dispondrán de prioridad semafórica o sistemas de guía.
- Todas las paradas estarán completamente adaptadas al sistema. Serán abiertas. El vehículo podrá aproximarse a la parada y quedarse a su nivel; las paradas dispondrán también de paneles electrónicos con el tiempo de paso.
- Los viajeros comprarán y cancelarán sus billetes en la propia parada, y podrán acceder y salir del autobús por cualquier puerta.
Dispondremos de 60 minutos de trasbordo gratuito entre líneas. A su paso por el centro, las principales ventajas de la «LAC» serán la reducción de la contaminación acústica y por partículas, la disminución del tráfico, así como una mayor velocidad al desplazarnos en ella.
Ya conocemos el sistema al cual pertenece la «LAC», en próximos artículos veremos su historia para saber cómo ha llegado este sistema a nuestra ciudad; y trataremos los cambios que habrá en el transporte público de la ciudad con la implantación del nuevo sistema.
Imagen línea verde en Curitiba, CC BY-SA 3.0 por Mariordo en Wikipedia – Imagenes LAC, por Aleste en sigatrabajando.com
Según tengo entendido (obviamente) tendrán prioridad semafórica. Pero una prioridad preestablecida. Se han establecido una serie de frecuencias y, sobre todo, tiempos en las paradas que están obligados a cumplir para que cuando partan se encuentren verde y así se cumplan los 3min de frecuencia en hora punta 🙂
Eso creo que se denomina técnicamente una onda verde, supongo que es a eso a lo que te refieres ¿no?. Sería genial si existe este tipo de coordinación.
Mas o menos sep! Las fases de los semáforos las han estudiado/establecido de forma que considerando el tiempo que tardan en recorrer los tramos y el supuesto tiempo que tardarían en bajar y subir las personas (según me dijeron si por un casual la gente tardara mucho menos el bus debería seguir esperando en la parada hasta alcanzar la duración presupuesta, aunque supongo que ocurrirá esto) la LAC siempre esté en una onda verde. La pregunta que yo me hago es: Cuándo llegue el metro, él va abriendo los semáforos según pasa, ¿toda esta configuración se irá al garete?, ¿afectará mucho a las frecuencias de 3minutos?.
La prioridad semafórica del Metropolitano de Granada sólo afectaría en la Caleta y en Villarejo, pero si, afectaría a este sistema. De todos modos el sistema no se rompe, simplemente hay que esperar a la siguiente onda verde.
Puede provocar un retraso en algún autobús, pero bueno, nada más allá de cualquier incidencia tradicional de cualquier servicio. Simplemente puede que tarde 4 minutos en pasar en lugar de 3, pero luego regularía hora en la siguiente cabecera y saldrían de nuevo con 3 minutos de diferencia.
Si no circula segregado del tráfico normal y con prioridad semafórica, no deja de ser un bus más, como cualquier otro que se come los atascos y las dobles filas, porque me da que circulará por el carril derecho de las calles y las paradas estarán donde siempre. Quizá la única ventaja sea lo de subir y bajar por cualquier puerta.
Aunque el carril-bus por donde circulará no es completamente segregado, sí que se vigila su ocupación y se advierte mediante señales verticales reflectantes que su ocupación está penada bajo multa, cosa que actualmente disuade a muchos conductores a parar en doble fila. La ventaja que conlleva esto es que el sistema puede asemejarse más que alejarse de un bus de tránsito rápido.