El consejero de Transportes ha anunciado recientemente que a lo largo de 2015 migrarán los billetes sencillos y de 10 viajes al soporte sin contacto, erradicando totalmente el actual soporte magnético. No se han dado más detalles sobre la aplicación de esta novedad ni si se refería solamente a los servicios de la capital o también a los autobuses interurbanos.
En cualquier caso, se trata de una medida positiva que responde a la lógica de intentar simplificar los soportes de los distintos títulos, apostando por el que ofrece una mayor comodidad al usuario, además de reportar en un ahorro en los costes de mantenimiento de las máquinas canceladoras.
A falta de tener más información, sería deseable que la conversión de estos títulos al soporte sin contacto favoreciera la creación de una tarjeta anónima de cartón que pudiera ser adquirida en cualquier máquina expendedora, de la misma manera que ya se hace en otras ciudades, como Valencia o Lisboa. Sería el momento ideal para unificar las distintas tarjetas que se han creado en los últimos años en una sola cuya única variación sería el material utilizado para su fabricación en función del uso y la preferencia del portador.
Pero este proceso no debería quedarse simplemente en un cambio de soporte. Es la ocasión para replantearse el actual sistema tarifario, repleto de obstáculos para los usuarios a los que no les compensa el abono de 30 días, de manera que todos tengamos la misma facilidad de uso del sistema de transporte, poniendo la infraestructura al servicio de todos los viajeros y no al revés.
Muchas ciudades han aprovechado el soporte sin contacto para sustituir los viejos títulos multiviaje por cómodas tarjetas monedero recargables de las que se va descontando el saldo en función de los trayectos realizados. Este sistema permitiría aprovechar al máximo la extensa y compleja red de transporte público que tenemos en la Comunidad de Madrid, evitando las absurdas combinaciones que en ocasiones es necesario realizar para llegar a nuestro destino. Y es que la integración tarifaria sigue siendo la gran asignatura pendiente para el Consorcio y la Consejería.
Confiamos en que los responsables del transporte público de nuestra región no desperdicien la oportunidad que tienen por delante para sacar todo el provecho a un soporte que, si bien para los madrileños es novedoso, en otras ciudades se lleva usando más de diez años. Los próximos retos deberán ser el pago a través de tecnología NFC o los sistemas pospago, que ya son una realidad en otras áreas de nuestro país. Incluso la eliminación de la compra del billete sencillo a bordo de los autobuses para ganar en agilidad, sustituyéndolo por el pago a través de tarjetas bancarias contactless, como se ha hecho recientemente en Londres. Pero no les pidamos todo de golpe no sea que se asusten.
En las ATM de Girona, Lleida y Tarragona el único título multipersonal, la T-10, también es en soporte sin contacto y anónima y lógicamente se puede usar por más de un viajero a la vez.
¿Y qué pasará con los billetes propios de Cercanías? ¿También se pasan a la tarjeta o seguirán con el billete magnético? Ni que decir que sería un excelente momento para unificarlos todos, aunque espero que mantengan el mensual de ida y vuelta que tiene ahora mismo Renfe, que para los que no necesitamos hacer viajes ilimitados va muy bien de precio (ojalá este billete se pudiese usar también en el metro y el bus)
Imagino que se hará como funciona en muchas ciudades hace ya bastante tiempo. Los que tenemos abonos mensuales o anuales, pues con una tarjeta de plástico «dura» lo cual es más lógico cara a evitar su desgaste.
Los viajeros ocasionales de un día, o pocos, o que recarguen el bonometro de 10 de vez en cuando, pues deberían tener una tarjeta de cartón recargable, cuya primera adquisición costaría 50 céntimos o un euro.
Este sistema es así en Lisboa, Oporto, Sevilla, etc, etc. Una tecnología más que trillada y que aquí parece que implantamos como si fuese el no va más.
Y, si los que tenemos ahora el abono, hay un mes que vamos a tirar de bonos de 10, pues estos también se cargarían en la TTP.
Al menos esto es lo que se dijo hace tiempo, que la tarjeta estaba preparada para acumular hasta tres tipos de billetes distintos y simultáneamente.
Totalmente de acuerdo con el contenido de la noticia. Y con muchos de los comentarios: ¿el billete sencillo también irá en este soporte? Si un usuario ocasional necesita un billete sencillo, ¿le darán una TTP? Como esto último no lo creo posible, habrá que ver.
Viendo la actual dinámica, capaces de que tengamos que sacarnos otra tarjeta para los viajes ocasionales (y espero que en ese caso por.lo menos sea de otro color).
Por cierto, ¿Cómo funciona en otras ciudades? ¿Sería el fin de los billete multipersona y transferibles? Es decir, un grupo de 5 personas va a hacer un viaje da ida y vuelta al mismo lugar y de saca un bonobús; o el fin del bonobús que va rotando por los miembros de una familia en funciona de las necesidades.
En Lisboa y Oporto por ejemplo, las tarjetas anónimas de cartón sólo pueden ser utilizadas por una persona a la vez: una persona=una tarjeta. Quizás sea lo más cómodo de cara a la operación. En Londres con la Oyster pasa igual. No sé si en otros sitios las tarjetas monedero pueden usarse por varios viajeros a la vez. A ver si alguien comparte otras experiencias.
En Zaragoza, sin ir más lejos, la tarjetaBus es anónima
En eso zaragoza va la q mejor. Hasta el billete sencillo es contactless . Y luego hay tarjeta bus(sin nombre) y ciudadana(con nombre)ambas de plastico.el sencillo es de un papel superdificil de romper xq dentro lleva la antena flexible nfc. Y la tarjeta ciudadana es una pasada, la usan para todo, incluyendo piscinas museos parkings pagos bibliotecas…. cuando estuve ahi me qiede impresionado. Aqui en BCN aun no tenemos ni la tmobilitat q se decia hace unos años q habria en 2014. En soportes de abonos etc nos gana incluso madrid. Lo unico q tenemos mejor(pero bastante mejor)es la integracion tarifaria.a ver si la ponen ya, q viajo mucho a madrid, y seria una gozada viajan entre metro cercanias bus etc gastando un solo viaje. Creo q lo mejor serian tarjetas monedero. Impersonales de plastico, como las oyster de LND o la de ZGZ, y abonos. Algo asi como una ttp no nominal
¿Cómo de viable es el modificar las máquinas expendedoras para que den un nuevo tipo de billete, el sin contacto de cartón? ¿Sería factible aprovechar el espacio que dejen los magnéticos?
+1 a todo. Puestos a pedir, una vez unificados los soportes lo que encabezaría mi lista de deseos es que se puedan comprar los mismos títulos en las expendedoras de Cercanías y Metro (que siendo que las hace la misma empresa, no sé por qué todavía no se puede). O, bueno, quiero decir, no necesariamente los mismos títulos, sería absurdo que vendieran sencillos de Metro en las estaciones de Cercanías (preferiría que hubiese billetes sencillos integrados), pero poder comprar Abonos turísticos y recargar la TTP lo veo completamente imprescindible.
Una tarjeta de cartón recargable para viajes ocasionales o para bonos tipo metrobús o el billete turístico por el que pregunta Maya Palmer abarataría mucho los costes. Sinceramente, si alguien viene a Madrid para pasar unos días y al coste del abono que escoja tiene que sumarle el coste del soporte, no le sale a cuenta.
Bueno bueno, yo estoy contento. Como usuario ocasional de transporte publico le tenia ganas a este anuncio.
Falta mucho como dices, pero que remedio.
También se harán sin contacto los billetes turísticos?